Exquisita finca ibicenca con auténtico encanto, enclavada en un sereno entorno residencial, presenta unas excepcionales perspectivas de renovación a la vez que hace honor a su encanto rústico y herencia mediterránea.
Actualmente consta de tres dormitorios, un baño, una sala de estar y cocina dentro de la casa principal, el anexo ofrece una mayor versatilidad para adaptarse a las preferencias individuales. Esta residencia combina armoniosamente naturaleza y tradición, ofreciendo una experiencia de vida sin igual.